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The Whale me ha dejado un enjambre de emociones dentro, y una humedad en los ojos. The Whale no va de un hombre obeso, va del ser humano y la vida, con su cinismo, su dolor, y su leve aroma a reivindicación. Charlie es un tipo que la vida se ha empeñado en tener como víctima, sin embargo, Charlie no deja de dar luz. Es una víctima, sí, pero resplandece. La vida desaparece demasiado pronto, y va dejando a su paso un sabor agridulce, una culpa, remordimientos y arrepentimientos. Te das cuenta de que todo pudo ir mejor, que tú pudiste haberlo hecho mejor, pero fuiste tan necio que no te percataste de que la vida desaparece demasiado pronto, y arrasa con todo a su paso. Implacable.
The Whale me ha abrumado; ha traspasado mis emociones como una especie de placer morboso. Es una película que pega fuerte, que pega en pleno rostro a la vida, a la humanidad, a la sociedad; y si de algún modo te ha tocado ser una ballena en medio del océano, entonces te vence por knockout.
Este es el tipo de películas que agradezco y que pienso salvan la Industria de Hollywood, tan llena actualmente de trivialidades. Brendan está impecable. Impecable. Esta actuación le ha valido su primer Óscar y yo que de esto también dudaba he quedado convencida: lo merecía. Se funden un poco el actor y el personaje, llegas a entrever un poco de su realidad y acaso, quien sabe, de la tuya. Solo tienes que saber cómo mirar. El resto del elenco le soporta muy bien, válida la nominación por el papel secundario, válidos el resto de los personajes. En mi criterio es una película que hay que ver, no como quien va a ver un show o un simple entretenimiento, sino como quien va a contemplar la realidad a través de un espejo. Bien por Fraser. Bien por The Whale. Bien por Hollywood, y bien por la Academia.
The Whale me ha abrumado; ha traspasado mis emociones como una especie de placer morboso. Es una película que pega fuerte, que pega en pleno rostro a la vida, a la humanidad, a la sociedad; y si de algún modo te ha tocado ser una ballena en medio del océano, entonces te vence por knockout.
Este es el tipo de películas que agradezco y que pienso salvan la Industria de Hollywood, tan llena actualmente de trivialidades. Brendan está impecable. Impecable. Esta actuación le ha valido su primer Óscar y yo que de esto también dudaba he quedado convencida: lo merecía. Se funden un poco el actor y el personaje, llegas a entrever un poco de su realidad y acaso, quien sabe, de la tuya. Solo tienes que saber cómo mirar. El resto del elenco le soporta muy bien, válida la nominación por el papel secundario, válidos el resto de los personajes. En mi criterio es una película que hay que ver, no como quien va a ver un show o un simple entretenimiento, sino como quien va a contemplar la realidad a través de un espejo. Bien por Fraser. Bien por The Whale. Bien por Hollywood, y bien por la Academia.
