Y entonces abres los ojos y te das cuenta que en la vida real no se dicen esas frases de películas, que nadie cruzaría un océano para abrazarte cuando tengas frío. Que las historias de amor sólo existen en canciones; que las personas cuentan mentiras; que siempre será más fácil perdonar que olvidar y que las cosas nunca vuelven a ser lo mismo. Que las apariencias engañan,que a veces quienes visten de negro tienen el alma más limpia que cualquiera que vista de color; que aquella que se hace la fuerte, dura y sin corazón, en las noches usa pijamas de arcoíris y unicornios y llora con el final triste de alguno de sus libros; aprendemos que nadie es eterno y todos al final se van, que muchas de esas "amistades verdaderas" terminan fallando, que en la vida todos somos temporales, que es mejor no esperar nada de nadie, que hay quien te dice "no quiero nada" y termina secándote por completo y que desgraciadamente ya no somos niños.