Luego de haberle robado los planos para construir la máquina del tiempo a Herbie, sintió que había llegado el momento de viajar, lejos de aquí buscando un mundo mejor. Sin tener los conocimientos mínimos de como funcionaba ese artefacto que el construyó utilizando un viejo refrigerador americano Westinghouse y dónde le colocó dentro una calculadora Casio enchufada al Reloj de las Eras, la cual tenía la pantalla medio mojada y había que presionar el cristal a cada rato porque los números no se distinguían, pero "pinchaba" que era lo importante.

Aquello parecía una caja de muerto electrónica. Antes de accionar el arranque, guardó provisiones en la parte del congelador por si acaso. Si porque no es fácil viajar por el tiempo y aparecer en un lugar donde no haya nada que jamar. El estaba acostumbrado, pero es mejor precaver esta vez. Miró por última vez el patio de su casa donde su perro Ladrillo le ladraba con los ojos desorbitados. ¡Pobre animal! Quizás era el único ser cuerdo en esta historia. Pues Filete (así se llama nuestro protagonista) cerró la puerta del Frigidaire y accionó el arranque.

Que conste que no se sintió absolutamente nada, peor lo que Filete luego de un rato trató de abrir la puerta de su máquina del tiempo por dos motivos: Una para ver si caminaba esa verga y también porque se estaba asfixiando encerrado en esa trampa mortal. ¡Inútil! El refrigerador cada vez que sabe que tiene carne en su interior se pone más cuadrado y cerrado que un CVP sin merienda. Esto hubiese sido el fin del protagonista y de la historia si yo no manejara los hilos del guión, así que vamos a decir que por un "azahar del destino" la puerta se abrió milagrosamente ya cuando Filete estaba morado y con los ojos llegando a su nariz.

Sacó la cabeza de su encierro y aspiró una gran bocanada de aire, más bien de humo porque era lo que cubría su armatoste. Miró alrededor y como a unos metros de él se veía un bulto de gente reunida mirando una gran fogata. Al principio agarró tremendo encabronamiento pensando que la máquina estúpida lo había llevado a un campismo o una escuela al campo, pero cuando pudo observar mejor se dió cuenta que había algo raro en la ropa de la gente.
¡Puro trapo amarrado con cuerdas y además capuchas! "Esto seguro es una obra de teatro al aire libre", pensó. Pero bueno, salió de su "máquina del tiempo", luego agarró bastante paja que estaba puesta a su lado en forma de montaña y se puso a tirarle pajas a su artefacto hasta dejarlo cubierto. Luego caminó hacia la multitud a ver de qué iba la reunión o la cola.

Nada más veía caras feas, hasta las mujeres eran feas, incluso la que se quemaba en la hoguera ya estaba demacrada. Filete se quedó pensativo mirando a la gente para tratar de preguntarle a alguien... a alguien... a alguien... ¿Pero que carajos? ¡¡¡Se está quemando una mujer en la hoguera!!! Fué tanta su sorpresa que trató de mirar a ver si la gente no hacía nada porque estaba grabando con su celular o algo (ya saben que ahora la gente graba y después, si acaso, ayuda), pero no. No tenían ni un espejo en la mano. ¡Alguien que ayude a apagar el fuego!, gritó y nadie se inmutó, menos el que estaba sentado en el estrado cerca de la hoguera y escribía en un pergamino con una cruz de ganso. Este le hizo una seña a un armario humano que había detrás de él y tenía una capucha negra y una máscara de hockey y además empuñaba sobre su hombro un machete, digo un hacha que ni filo tenía, nada más servía para dislocar huesos. Pues este personaje fue el que mando el escriba a la dirección donde estaba Filete dando gritos. Al ver ese gorila que se le acercaba Filete trató de meter su mejor Sprint pero se sintió agarrado por los brazos por las personas que, hasta ahora, no se habían invitado a hacer nada. Trató de hacer dominio de sus conocimientos de Kung fu pero lo tenían bien agarrado.

Ya casi tenía al verdugo encima cuando se acordó de su bocina de Bluetooth y la encendió. Al momento salió una música maravillosa que dejó paralizado a todos seguido de un "saldearribademiquetupesa" que puso en estampida a todos los que lo sujetaban, incluyendo el gradulon con el hacha. El escriba se levantó asustado de su silla, con la pluma de ganso en la mano, y gritó: Hereje!!! Detrás del parapeto dónde estaba el escriba salieron corriendo 6 personas encapuchadas que de lejos parecían los de Assassin's Creed, pero de cerca tenían cara de venir con bastante mala leche a partirle la madre en dos.

Comenzó una trepidante carrera alrededor de la hoguera con Filete delante, los Assassin's Creed detrás, los pobladores corriendo en todas las direcciones como hormigas, la música de la bocina sonando con voces guturales, el grandulon agachado llorando detrás de una pared, el escriba colorado gritando incoherencias, con su pluma de ganso en la mano y la mujer achicharrandose en la hoguera.

En medio de la carrera y confusión pasó por parapeto y se llevó el papel del escriba, trató de apagar la hoguera pero vio que era inútil, solo atino a coger uno de los cubos llenos de líquido que había cerca del parapeto y se lo lanzó al escriba. Este gritó de terror y salió corriendo, olvidando la pluma de ganso, y al pasar cerca de la hoguera se encendió como un mechón ¡Fuan! Y salió corriendo envuelto en llamas hacía un río que habia detrás.

Filete llegó con la lengua afuera hasta donde estaba su máquina del tiempo y se puso a quitar la paja que tenía encima, más bien empezó a tirarle bultos de paja a los Assassin's Creed que tenía detrás. Estos no se quedaron de brazos cruzados y también comenzaron a devolverle los pajasos a Filete. En pocas palabras se tiraban pajas unos a otros. En eso la música cambió de tema con otros gritos guturales y eso provocó que los Assassin's Creed se replegaran un poco y se alejaran, pensando que iba a lanzar excrementos. Gracias a esto Filete pido terminar de quitar la paja de la máquina, montarse dentro, cerrar la puerta y tocar el On de la calculadora para arrancar. Estando dentro sintió unos golpes y trastazos en el enchapado de la máquina, pero solo fue un momento. Estuvo un rato escuchando expectante, hasta que sintió que otra vez se sofocaba dentro de ese sarcófago. Esta vez había dejado un cable en el marco que le permitió abrir la puerta. Abrió y respiró aliviado al ver que no había nadie alrededor. Todo el lugar donde estaba había desaparecido y en su lugar todo era desierto, monótono, inhóspito. Una piedra allí, una laguna humeante por aquí, un bosque a lo lejos, una pata rugosa de un dinosaurio por acá, unas montañas altas cubiertas por nubes a lo lejos, unas... unas... unas... ¡¡¡Una pata rugosa de dinosaurio!!! ¿Y a dónde vine a parar ahora?

El dinosaurio que más bien era "dientesaurio" lo miraba de forma curiosa como un trozo de carne colgado en un gancho. A pesar de la situación peliaguda, Filete realizó su famoso movimiento especial: Le lanzó un pote de perfume por la nariz al bicho y mientras este trataba de rascarse con sus paticas cortas, Fuente salió corriendo hacia el bosque cercano donde alguien lo esperaba oculto entre los arbustos.

Continuará....