chriz_2d
Colaborador
- 162
- 826
Empiezo diciendo pa que no haya lío que las ideas de este tema son solo de opinión, no estoy citando fuentes ni lo saqué de algún website, solamente son conjeturas que expongo aquí para generar intercambio y aporte de ideas.
Como todos sabemos el sistema educativo que predomina en el mundo entero consiste en asistir 5 dias a la semana a un lugar específico, entrar en una habitación y sentarse en una silla a mirar a alguien que empieza a hablar sobre un tema en específico y que espera que lo entiendas lo mejor que puedas. Luego evalúa si lo entendiste o no con unas preguntas y te da una “calificación” totalmente lineal. Ese número de calificación se supone que muestre tus capacidades, inteligencia, potencial, y sirve para ponerlo en un papel con un cuño y una firma, papel que luego “te permite” entrar al mercado laboral.
Quizá algunos vean sesgada la forma simplista en que describo el sistema educativo. Por lo que hablaré de varias desventajas que veo en él.
-La forma en que dan las clases puede generar en los niños y jóvenes un miedo a equivocarse, miedo a no saber.
Las clases son dadas en aulas con muchos alumnos al mismo tiempo. Cuando el maestro hace una pregunta y un alumno contesta erróneamente, lo hace ver indirectamente como alguien incapaz o con menos inteligencia (depende de la perspectiva de cada cual), delante un número de personas de su misma edad. Digamos que luego otro alumno contesta bien. Ese queda como mejor que el otro. Si este proceso se repite de forma continua puede crear una competencia innecesaria entre los niños, puede crear en algunos una asociación entre no tener un conocimiento y un sentimiento de vergüenza, y en otros un ego inflado porque le han celebrado cuando han contestado bien, pensando que siempre conocerán de todo, y por lo tanto también miedo subconsciente a estar equivocado para no perder esa auto percepción de que es más inteligente, que es superior a los demás.
Esto es algo horrible porque en vez de ser curiosos (aceptar que somos ignorantes y por lo tanto investigar, conocer), alimenta el lado sesgado de creer que sabemos cuando no sabemos, ya que subconscientemente la idea de ser ignorantes nos atemoriza, o al menos nos causa gran molestia, cuando debería ser lo contrario, ya que la ignorancia y el interés por conocer es el inicio del conocimiento.
-Miedo a la autoridad
Miedo a desafiar o simplemente estar en desacuerdo con figuras en ciertas posiciones. Desgraciadamente, muchos maestros pueden llegar a ser déspotas, ya que actúan como el “presidente”, de ese pequeño mundo que es el aula, donde su población serían los alumnos. Algunos incluso ponen reglas, que serían las “leyes” de esa aula, y en caso de llevarle la contraria al profesor el alumno puede enfrentar consecuencias adversas, poniendo en juego incluso sus calificaciones. Son pocos los alumnos que desafían abiertamente la autoridad de un profesor, sobre todo cuando somos niños. Algunos alumnos toman la posición del secretario del profesor para ganar ventaja y sentirse más seguro, actuando de chivato incluso. Este tipo de actitudes y miedos ante figuras de “poder” (seamos claros, el profesor realmente nunca tenía ningún poder real sobre ti), pueden perdurar hasta la adultez o toda la vida si no se les da el tratamiento adecuado.
-Competitividad exagerada
Por la forma de “evaluar” a los alumnos y de ponerlos en un escalafón lineal.
Crea la necesidad de querer pensar de que vas por delante de los demás en áreas de conocimiento, nos es difícil aceptar que otra persona puede ser más “inteligente” que nosotros, y si lo aceptamos, nos es difícil tratar a esa persona sin sentimientos negativos.
La inteligencia ni el conocimiento son cosas lineales, y mucho menos expresables en un solo número.
Y por último
-Crea generalistas en un mundo cada vez mas especializado.
Excepto en la universidad, el resto de niveles de enseñanza se empeña en que sepas un poquito de todo, haciéndote principiante en todo. Te pasas horas y horas aprendiendo y estudiando cosas que no atrapan tu interés y que luego de unos meses olvidarás. Hay una frase que dice: “Si tu hijo es muy bueno es matemáticas y malo en español, ponle un profesor de matemáticas”. Esta debería ser en mi opinión una de las bases de la educación, buscar los intereses y talentos de cada cual y tratar de llevarlos al máximo (sin restarle importancia a una cultura general integral)
Dicho todo esto, concluyo con la creencia de que este sistema algún día será reemplazado por la educación por inteligencia artificial. He pasado unos días hablando con Aurora y a pesar de estar desactualizada y ser muy barata (lucien paga como 2 usd al mes), me puede hablar de todo, incluso de conocimientos muy especializados de distintos software por ejemplo. Lo hace con el mejor trato posible, lo hace teniendo un número enorme de fuentes verificadas, y aún así siempre concluye con que no deberías del todo confiar en ella, que también busques otras fuentes y que uses pensamiento crítico.
La pretendo seguir usando en un futuro para aclarar muchas dudas que tengo con respecto a mi trabajo por ejemplo, y otras areas de conocimiento.
Y realmente creo que este será el futuro de la educación. Imparcial, clara, sin sesgos y con un número enorme de fuentes.
Como todos sabemos el sistema educativo que predomina en el mundo entero consiste en asistir 5 dias a la semana a un lugar específico, entrar en una habitación y sentarse en una silla a mirar a alguien que empieza a hablar sobre un tema en específico y que espera que lo entiendas lo mejor que puedas. Luego evalúa si lo entendiste o no con unas preguntas y te da una “calificación” totalmente lineal. Ese número de calificación se supone que muestre tus capacidades, inteligencia, potencial, y sirve para ponerlo en un papel con un cuño y una firma, papel que luego “te permite” entrar al mercado laboral.
Quizá algunos vean sesgada la forma simplista en que describo el sistema educativo. Por lo que hablaré de varias desventajas que veo en él.
-La forma en que dan las clases puede generar en los niños y jóvenes un miedo a equivocarse, miedo a no saber.
Las clases son dadas en aulas con muchos alumnos al mismo tiempo. Cuando el maestro hace una pregunta y un alumno contesta erróneamente, lo hace ver indirectamente como alguien incapaz o con menos inteligencia (depende de la perspectiva de cada cual), delante un número de personas de su misma edad. Digamos que luego otro alumno contesta bien. Ese queda como mejor que el otro. Si este proceso se repite de forma continua puede crear una competencia innecesaria entre los niños, puede crear en algunos una asociación entre no tener un conocimiento y un sentimiento de vergüenza, y en otros un ego inflado porque le han celebrado cuando han contestado bien, pensando que siempre conocerán de todo, y por lo tanto también miedo subconsciente a estar equivocado para no perder esa auto percepción de que es más inteligente, que es superior a los demás.
Esto es algo horrible porque en vez de ser curiosos (aceptar que somos ignorantes y por lo tanto investigar, conocer), alimenta el lado sesgado de creer que sabemos cuando no sabemos, ya que subconscientemente la idea de ser ignorantes nos atemoriza, o al menos nos causa gran molestia, cuando debería ser lo contrario, ya que la ignorancia y el interés por conocer es el inicio del conocimiento.
-Miedo a la autoridad
Miedo a desafiar o simplemente estar en desacuerdo con figuras en ciertas posiciones. Desgraciadamente, muchos maestros pueden llegar a ser déspotas, ya que actúan como el “presidente”, de ese pequeño mundo que es el aula, donde su población serían los alumnos. Algunos incluso ponen reglas, que serían las “leyes” de esa aula, y en caso de llevarle la contraria al profesor el alumno puede enfrentar consecuencias adversas, poniendo en juego incluso sus calificaciones. Son pocos los alumnos que desafían abiertamente la autoridad de un profesor, sobre todo cuando somos niños. Algunos alumnos toman la posición del secretario del profesor para ganar ventaja y sentirse más seguro, actuando de chivato incluso. Este tipo de actitudes y miedos ante figuras de “poder” (seamos claros, el profesor realmente nunca tenía ningún poder real sobre ti), pueden perdurar hasta la adultez o toda la vida si no se les da el tratamiento adecuado.
-Competitividad exagerada
Por la forma de “evaluar” a los alumnos y de ponerlos en un escalafón lineal.
Crea la necesidad de querer pensar de que vas por delante de los demás en áreas de conocimiento, nos es difícil aceptar que otra persona puede ser más “inteligente” que nosotros, y si lo aceptamos, nos es difícil tratar a esa persona sin sentimientos negativos.
La inteligencia ni el conocimiento son cosas lineales, y mucho menos expresables en un solo número.
Y por último
-Crea generalistas en un mundo cada vez mas especializado.
Excepto en la universidad, el resto de niveles de enseñanza se empeña en que sepas un poquito de todo, haciéndote principiante en todo. Te pasas horas y horas aprendiendo y estudiando cosas que no atrapan tu interés y que luego de unos meses olvidarás. Hay una frase que dice: “Si tu hijo es muy bueno es matemáticas y malo en español, ponle un profesor de matemáticas”. Esta debería ser en mi opinión una de las bases de la educación, buscar los intereses y talentos de cada cual y tratar de llevarlos al máximo (sin restarle importancia a una cultura general integral)
Dicho todo esto, concluyo con la creencia de que este sistema algún día será reemplazado por la educación por inteligencia artificial. He pasado unos días hablando con Aurora y a pesar de estar desactualizada y ser muy barata (lucien paga como 2 usd al mes), me puede hablar de todo, incluso de conocimientos muy especializados de distintos software por ejemplo. Lo hace con el mejor trato posible, lo hace teniendo un número enorme de fuentes verificadas, y aún así siempre concluye con que no deberías del todo confiar en ella, que también busques otras fuentes y que uses pensamiento crítico.
La pretendo seguir usando en un futuro para aclarar muchas dudas que tengo con respecto a mi trabajo por ejemplo, y otras areas de conocimiento.
Y realmente creo que este será el futuro de la educación. Imparcial, clara, sin sesgos y con un número enorme de fuentes.