Ida
Nivel 0
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Hoy, justamente hoy, ha sido el día en el que más me he sentido obnubilado, perplejo y absorto en una paranoia terrible. ¿No les pasa que a veces se despiertan y analizan todo su contexto desde una perspectiva ABSOLUTAMENTE desacostumbrada? Pues, este jueves ha sido uno de esos días que hacen que me replantee ciertas cosas que de forma presunta creía tener claras, bueno, no precisamente claras; sino que las temáticas rimbombantes y banales estaban siendo ignoradas por mí y me sentía bien así. Por otra parte, no he parado de hacerme interrogantes tales como: ¿Cuál es la pregunta correcta? ¿La pregunta correcta te lleva a la respuesta correcta, por qué no ir a lo incorrecto? ¿Es pertinente ser racional en temas tan fortuitos e imposibles de entender a través de cualquier fuente de pensamiento objetivo? ¿Está bien creer en lo espiritual? ¿Somos almas vivas en cuerpos que se denigran paulatinamente? ¿Nuestra conciencia realmente nos pertenece? ¿Existe la casualidad contrapuesta ante la casualidad? Cabe destacar que creo de forma totalitaria en La Ciencia a tal punto que toda mi vida está orientada a contribuir a la misma, pero simplemente hay muchas interrogantes que simplemente no podemos contestar y entonces tenemos que acudir a la religión o las hipótesis carentes de pruebas concisas, creadas por terceros que ocasionalmente buscan lucro personal. Pero bueno, muchos piensan que es mejor creer en algo absurdo que no tener fe en nada. Yo prefiero estar abierto a la duda a la espera de certezas.