Cuando se citan las causas de un divorcio, la que ocupa el lugar número uno, que incluso está por encima de otras como la violencia doméstica, es la "incompatibilidad de caracteres". Esto bien puede ser un título genérico para otras cosas subyacentes, pero siendo honestos, lo engloba a la perfección.
Cuando dos personas se conocen, hoy en día saltan a la cama primero y hacen preguntas después. No es ser románticos ni nada, pero a mí parecer, antes de llegar a ese nivel de intimidad, deberían llegar a otros niveles emocionales donde haya una compatibilidad y entendimiento. Esto no quiere decir que se logre siempre, por supuesto, porque a fin de cuentas todos los días cbiamos un poco, pero si como pareja fallamos en saber conocer al otro, entonces la cosa va mal desde el inicio.
Lo mismo pasa con un matrimonio. La gente se desespera. Quieren vivir juntos por mil razones. De preferencia a veces vivir solos. Esto último tiene su explicación racional, puesto que una pareja necesita su espacio para desarrollarse y crecer. Cuando conviven con otros seres queridos, esto es bastante más difícil, y superarlo no es precisamente sencillo.
En lo personal, considero que hoy en día hay un exceso de promiscuidad muy alto en la sociedad. El hombre no es un ser monógamo por naturaleza sino por elección. Por desgracia, esa elección se ha hecho sinónimo de libertad, y prefieren estar probando cosas diferentes porque "es más fácil".
Ya lo dijo alguien ahí arriba, y es que el miedo al compromiso se ha arraigado como si ya fuera normal. Todos tenemos miedo a que nos hieran, y buscamos la manera en que eso pase lo menos posible. Pero aquí es donde entra el no estar listos para comprometerse a algo a largo plazo. Especialmente si ese algo es otra persona. Ya ni hablemos de los hijos, que sabemos que muchas veces hay padres (madres y padres) que se desmarca de ellos como si nunca hubieran existido.
Entonces, (posibles) causas de ruptura matrimonial (haya papeles de por medio o no) hoy en día, a nivel global:
- Inmediata intimidad sexual con el compañero, que redunda en basar una relación (muchas veces) en sólo este acto.
- Convivencia instantánea. Sin una profundización en caracteres individuales.
- Total falta de sentido del concepto familia. Una familia también es de dos personas, donde cada una necesita su espacio, y este debe respetarse.
- Poco conocimiento real de la pareja. Si bien es cierto que todos los días aprendemos algo nuevo, la falta de interés agudiza el problema. No hay emoción, cero curiosidad, y lo que parecía ir muy bien termina desinflándose como un globo.
- Presión social. Esto parece que no, pero en gran medida influye en la dinámica de una pareja. La razón es simple, y está dada por la forma de pensar de cada uno. En el aspecto económico, por ejemplo, que es el que más golpea, están los estereotipos arcaicos de "el hombre tiene que mantener la casa", o este otro "la mujer es de la cocina". Menciono estos porque son los extremos. Sin embargo, la educación de cada miembro de la pareja puede coincidir o no. En esto se basa el conocimiento previo y la exploración de carácter.
Antes todo era más pausado. La pareja empezaba un cortejo. Podía durar lo que fuera, pero existía. Era el tiempo en que se aprovechaba para conocerse. Luego venía la parte del compromiso. Este podía durar meses, quizá hasta años. Sobre todo si los involucrados tenían una edad muy joven. Y ya luego el matrimonio.
Muchas parejas que vivieron esto no necesitaban de nadie más en sus vidas. Había amor, cariño, respeto... Como tbien había desavenencias. Esas siempre existen y existirán.
Otras parejas, en cambio, no corrían la misma suerte, y después del matrimonio llegaba el destape real. Pero ahí se quedaban juntas, porque, sí, la presión social una vez más haciendo de las suyas: estaba mal divorciarse. Aquí esto se veía mal en la mujer ?, mientras que el hombre ha salido ileso de esto el 99% de las veces.
Entonces, hoy en día, ninguna de estas etapas toma lugar. El cortejo es casi inexistente, y basan casi todo en la superficialidad que emana del facilismo: nos gustamos, somos compatibles físicamente, ya estamos juntos y nos vamos a vivir juntos...
Ummm...
Señores, dénse un tiempo. Tómenlo con calma. Si de veras las cosas funcionan entre ambos, de seguro lo harán mejor mientras más se conozcan. Pero bueno, no es así como piensan hoy en día muchas personas.
Creo que la institución del matrimonio también está subestimada. No hablo de que haya que casarse de punta en blanco para demostrar amor. Al contrario, lo que demuestra el amor son las acciones. Pero el firmar ese papelito crea un vínculo cuyo peso ante la sociedad, más allá de lo social, es más bien legal. El matrimonio ampara a la pareja, otorgándole al cónyuge ciertas prerrogativas y derechos que, de no estar casados legalmente, no existen. Es por eso que se reconoció el término de "pareja de hecho" en la última versión de la Constitución, porque otorga derechos y deberes.
Pero en fin, volviendo al tema de por qué duran menos que antes. Yo digo que la gente no está lista para pasar su vida con otra persona. Somos individualistas hasta el tuétano. Egoístas incluso. Preferimos estar solos y no responder por nadie. Bueno, según un amigo mío, las parejas hoy en día duran un máximo de 7 años. Después de ese tiempo, usualmente se separan. Los puntos de inflexión pasan por la costumbre, la adaptación, y sí, de nuevo, el compromiso mutuo.