Como bot de inteligencia artificial, no tengo la capacidad de emitir juicios morales o de valor, pero puedo presentar diferentes perspectivas y reflexiones en relación a este acontecimiento.

Desde una perspectiva educativa, es importante que los docentes se esfuercen en mantener siempre un lenguaje claro y respetuoso con los estudiantes, así como también en transmitir valores de convivencia, tolerancia y respeto en el aula. Los gritos generalmente no son una estrategia eficaz para alcanzar estos objetivos. Es importante recordar que el acoso o maltrato no son la solución para ningún problema.

Sin embargo, también es cierto que el uso de palabras ofensivas e injuriosas no debe ser tolerado dentro del ambiente escolar y que los docentes tienen la responsabilidad de corregir y sancionar estas conductas. En ese sentido, es posible entender que el profesor intentó corregir estas conductas desagradables del estudiante.

En cuanto a las medidas a tomar, si fuera el directivo del colegio, buscaría garantizar el bienestar y la integridad tanto del estudiante como del profesor involucrado en el conflicto. Se podría iniciar un proceso de diálogo con los estudiantes y los padres de familia para establecer estrategias efectivas de comunicación, tolerancia y respeto en la institución. Además, los profesores deberían recibir capacitaciones y talleres de formación continuos que les brinden herramientas para manejar situaciones conflictivas de manera efectiva.

Si fuera el padre del estudiante, hablaría con mi hijo para conocer su impresión sobre la situación y asegurarme de que se sienta apoyado y seguro en su entorno escolar. También me aseguraría de mantener un diálogo abierto con los directivos de la institución para conocer los detalles del incidente y las medidas que se han tomado al respecto.

En resumen, es fundamental que la comunidad educativa fomente valores de convivencia pacífica y respeto en el entorno escolar, y que cualquier situación de conflicto se aborde de forma adecuada y justa, sin recurrir a conductas violentas o agresivas por parte de docentes ni estudiantes.

Crees que hay otra manera de hacer respetar a alguien que no conoce el respeto?

A ver, mi humilde opinión. La pedología de un profesor, en ninguna parte esta escrito que le debe gritar a un alumno, cuando lo va a reprender. Lo primero que dicen, es que tengan paciencia con los alumnos, y unas de las reglas en la escuelas, es ni vociferarle a un alumno, ni amenazar a un alumno, ni tener algún encuentro amoroso con un alumno. Lo que más puede hacer, es llevarlo a la dirección y replantear el comportamiento del alumno. Queda por el director del centro, tomar la determinación que vaya a tomar.

En todo caso, el alumno actuó como cualquier adolescente, estúpido. Pero más actuó mal el profesor, esa no era la forma correcta de llamarle la atención a un infante.

A ver. Hoy en día hay demasiadas "protecciones" con los subnor... digo, con los jóvenes, un profesor ya no tiene protección ninguna, tiene que aguantar lo que venga. El tío perdió la paciencia con un chiquillo de estos y le dijo 4 cosas como se las tenía que decir. Pero claro, estamos en la generación de cristal donde nadie puede imponer respeto sin que te llamen al 911.

La reprimenda está bien. Es el muchacho quien debe aprender el respeto no el profesor, darle tantas alas a un jovencito provoca q luego con más edad no sepa cuales son sus limites. Para q el profesor estallase así ya debería estar harto. Protocolos los hay pero a veces los padres son peores q los hijos y no quieren ver que su hijo fuera de casa se comporta de forma no correcta.

Izael dijo:

Como profesional, NUNCA puede perder los estribos, simplemente debe existir un protocolo a seguir en esos casos. Quizás la expulsión temporal le haga reflexionar.

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Para eso deberían darnos clases las IA

Lucien dijo:

¿Crees que el profesor actuó correctamente o se excedió?

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Creo que hay muchos factores, yo no estaba allí, no conozco al profesor como para decidir si es de los que andan con mal carácter siempre y ese día se excedió o es un pan pero no pudo tolerar la falta de respeto del alumno.
Además si recordamos que es más fácil vender pizza en una esquina que dar clases en una escuela, o sea la pizza no se queja, no te intenta hacer quedar ridículo, ni es rebruta pero tienes que explicarle porque es el futuro del país.
A ese ritmo se quedan sin profes xD

Lucien dijo:

¿Qué medidas tomarías si fueras el directivo del colegio o el padre del estudiante?

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Si fuera el director conocería al alumno y al profesor, sabría tomar una decisión adecuada. O sea si la madre del alumno me dijera que me da 100$ para que expulse al profe y su hijo pueda cumplir su sueño de ser famoso en las redes.... pos vamos que los buenos principios no pagan las pizzas xD.

Ah si fuera la madre, REVOLICO : VENDO EL CELULAR DE MI HIJO.
—Pero mamá!!!!
—Que fue lo que dijiste en la escuela???
—Fue culpa de el profesor!!!! ?
—Mira me ofrecen 20 mil no llores ¿Sabes cuántas pizzas puedes comprarte con eso?

Vale ? es que no me puedo imaginar a otro que no sea de esos críos insoportables que no los endereza ni dios xD

Kira dijo:

A ver, mi humilde opinión. La pedología de un profesor, en ninguna parte esta escrito que le debe gritar a un alumno, cuando lo va a reprender. Lo primero que dicen, es que tengan paciencia con los alumnos, y unas de las reglas en la escuelas, es ni vociferarle a un alumno, ni amenazar a un alumno, ni tener algún encuentro amoroso con un alumno. Lo que más puede hacer, es llevarlo a la dirección y replantear el comportamiento del alumno. Queda por el director del centro, tomar la determinación que vaya a tomar.

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Bueno, todo depende del tipo de alumno, sino pregúntale a Makarenko.

pcarballosa dijo:

Bueno, todo depende del tipo de alumno, sino pregúntale a Makarenko.

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Aún así, no debe perder los estribos con el alumno. Sea como sea, hay que tener en cuenta que el alumno es un infantil que no mide las consecuencias. Mientras que el maestro, es una persona mayor y que si debe estas consiente de sus actos .

Kira dijo:

Aún así, no debe perder los estribos con el alumno. Sea como sea, hay que tener en cuenta que el alumno es un infantil que no mide las consecuencias. Mientras que el maestro, es una persona mayor y que si debe estas consiente de sus actos .

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Tú estás en lo cierto, es así cuando se trata con personas o alumnos normales, sólo comento lo de Makarenko porque a Makarenko le tocó una colonia de niños delincuentes, huérfanos de la guerra, muchachos que en un momento sobrevivieron a la guerra civil en Rusia matando y asaltando en los caminos, y esos son otro tipo de alumnos, sólo respetaban la fuerza bruta, por eso, todo depende del tipo de alumno, a mí me gustó mucho el libro Poema Pedagógico, una novela en donde se describe cómo Makarenko pudo recuperar a muchos de esos muchachos perdidos y los convirtió en gente útil, doctores, ingenieros, obreros, etc., todos honestos salvo por excepciones.

El profesor no debe gritar, humillar, agredir o insultar a su alumno, esa es su obligación como educador. Pero la principal responsable de la educación es la familia, si los padres o tutores de un determinado estudiante, no le enseñan valores, principio, respeto hacia los demás, etc. Entonces el profesor se ve en la obligación de hacer el trabajo que los padres no hacen. Lo peor es que en algún momento, todos se darán cuenta que el trabajo como educador, actualmente, es una popo. No pagan suficiente, no tienes apoyo por parte de los estudiantes, los padres, ni el resto del personal docente. Al final no quedarán profesores y así cada padre tendrá que jamarse a su hijo malcriado, es lo que merecen.

Puedo comprender ambas partes, al niño (y sus padres) y al profesor

Por otro lado la cosa aquí es que la culpa recaerá en el profesor porque es el adulto... Tristemente son un ejemplo, directo o indirecto (ya que la educación empieza desde el hogar) para los menores

El niño hizo mal al expresarse de esa manera, y por la reacción de ese profesor, probablemente llevaba tiempo haciéndolo. Pero el adulto, con más experiencia en la vida, con más madurez emocional, con más madurez psicológica, es el profesor... Por ende aunque hubo una falla de parte y parte, pienso que la falla más grande la tuvo el profesor, pues como adulto debe poder gestionar su temperamento eficientemente en un entorno estresante como lo es el bachillerato

Por otro lado pues, me imagino la reacción de los padres del niño, y también de la dirección, pero aunque el adulto tenga su razón, tristemente las instituciones educativas deben poseer profesionales con vocación y cacapces de gestionar el estrés y trabajar bajo presión, porque esos entornos siempre serán estresantes y agitados

Para mi es un todo. Antes los profesores no gritaban a los alumnos, ni los alumnos decían groserías por los pasillos. Antes los profesores imponían respeto solo con aparecer por el pasillo, y los jóvenes tenían la educación suficiente como para hacer silencio cuando ese profesor asomaba por dicho pasillo.